Alcalde Víctor Boluarte, pidió por la protección del pueblo cusqueño para vencer los estragos de la pandemia y trabajar por el florecimiento de nuestra ciudad.
Tras dos años de confinamiento y ausencias, el Señor de los Temblores, Patrón Jurado del Cusco, salió hasta el atrio de la Basílica Catedral del Cusco para reencontrarse con su pueblo, que se hallaba sediento de justicia y redención. En el marco de la celebración religiosa estuvo presente la Municipalidad Provincial del Cusco, presidido por el alcalde Víctor Boluarte Medina, acompañado por el Concejo Municipal, funcionarios y servidores, quienes participaron en la tercera bendición que impartió nuestro cristo crucificado.
En un acto solemne, en medio de cánticos, salmos y letanías, el Cristo de la Buena Muerte, conocido antiguamente con esa advocación, fue ataviado con el sudario con tejido andino, donado por primera vez durante más de 300 años de veneración, por la comuna provincial, como muestra de agradecimiento y homenaje a la sagrada imagen.
El sudario, es una pieza artística confeccionado por más de una decena de maestros artesanos del renombrado Centro Artesanal Cusco, quienes movidos por su infinita devoción y fe al Taytacha de los Temblores, asumieron el trabajo encomendado por la Gerencia de Turismo, Cultura, Educación y Deporte, bordando a mano cada detalle de aquella iconografía característica de la cultura andina de Chinchero y ponderando a nuestro emblema, el Escudo del Cusco.
El atuendo a base de fibra de alpaca, está compuesto por dos cuerpos; el sudario y el cinto, conocido como chumpi, del cual cuelgan flores de Kantu, que evoca el florecimiento de nuestra ciudad, lema de la actual gestión municipal.
Durante la bendición, la primera autoridad edil, con voz temblorosa y palpitante, pidió al Taytacha de los Temblores extienda su manto piadoso y con su infinita misericordia proteja a todo el pueblo cusqueño para vencer las dificultades que la Covid-19 dejó a su paso y ver a nuestro Cusco florecer.
“Patrón Jurado del Cusco, tu pueblo te rinde homenaje, te reza en este Lunes Santo y te pide que luego de estos dos años de dificultades, de tanta pena y dolor, de tantos hermanos que se fueron, de tantas dificultades y desasosiego, derrames tus bendiciones a nuestra ciudad y permitas con tu inmensa bondad, que el Cusco se recupere y vuelva a florecer”, pidió Víctor Boluarte Medina, alcalde del Cusco.
Asimismo, con un religioso recogimiento y una mística unción, el burgomaestre provincial pidió por cada uno de los integrantes de la familia institucional de la municipalidad provincial.11
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